Seguramente muchos asocian la fainá como un compañero ideal para la pizza, pero hace ya unos años la incorporamos al desayuno familiar, ya que en el fondo no es mas que harina de garbanzos.
INGREDIENTES:
– 250 g de Harina de garbanzos
– 650 cc de Agua
– 50 cc de Aceite de Oliva
– Sal o Stevia!, si, pueden endulzar la preparación
PREPARACION:
Tomamos un bowl, vertimos la harina de garbanzos de forma pareja.
Recomiendo usar un tenedor, y vamos agregando el agua y el aceite lentamente a la preparación, intentando que no se formen grumos, yo lo hago de forma intercalada, un poco de agua, un poco de aceite.
Cuando la preparación es homogénea, podemos agregar sal o stevia a gusto.
Si utilizan sal, pueden agregar pimienta negra y espolvorear con orégano.
Dejamos reposar la mezcla (pueden prepararla y dejarla de un dia para otro) o bien dejarla reposar una hora y continuar.
Encendemos el horno, a una temperatura media/alta, y colocamos la fuente donde vamos a realizar la preparación con aceite bien desparramado y lo dejamos 2 o 3 minutos que se caliente bien, esto nos asegura un buen piso para la faina.
Ahora bien, sacamos la fuente caliente y vertemos la preparación (si esta caliente escucharemos el ruidito de la masa cocinándose) y luego la volvemos a poner en el horno.
El tiempo de cocción es de unos 20 minutos, dependerá de la potencia del horno, por lo que recomiendo que la vayan controlando para que no se seque mucho. Ojo cuando la saquen déjenla reposar antes de intentar desamoldar.
El piso de la faina debe quedar crocantito!
Ahora si pueden disfrutar de una rica companía para el mate, sana y natural!